Aquí nadie me conoce”, “Además nunca volveré aquí” y “¿Quién quieres que me vea?” estos son pensamientos que deben evitarse: estar de viaje no significa olvidar la educación, la amabilidad y el sentido común.
Comience bien su estadía evitando hablar por teléfono mientras se registra. Realice todos los procedimientos primero, y luego puede notificar a su familia que ha llegado. Lo mismo ocurre con el pago.