UN POSTRE QUE CASI CAUSA UN CONFLICTO DIPLOMÁTICO

Segev Moshe, cocinero del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, y propietario de varios restaurantes en el país, no tuvo otra ocurrencia que finalizar la cena de gala que el mandatario israelí ofrecía al Primer Ministro japonés en visita oficial con unos bombones servidos en un zapato. No conozco ninguna cultura donde esté bien visto poner los zapatos en la mesa, pero para los japoneses es una gran ofensa. En Japón es habitual descalzarse cuando entras en casa o en algunos lugares públicos, de allí la cara de sorpresa del ministro japonés. Ni crisis de misiles, ni apoyos militares…lo que ha causado una crisis diplomática han sido ¡unos zapatos en una comida! Para que luego digan que no es importante el “gastro protocolo”…